Centro de Epilepsia de Freiburg

En el ambulatorio del Centro de Epilepsia se realizaría el diagnóstico diferencial del problema que usted presenta, comprobando a través de exploraciones complementarias si el cuadro es compatible con epilepsia. Para ello disponemos del uso ambulatorio durante 24 horas del Electroencefalograma. A continuación se clasificaría el tipo de epilepsia que usted presenta y así ofrecerle la terapia óptima con fármacos antiepilépticos o, según el caso, terapia adicional con la estimulación del nervio vago. En el ambulatorio también se realizarían otras pruebas complementarias, así como el asesoramiento personalizado de cara a la selección de los pacientes que se considerarían tributarios a tratamiento quirúrgico.

Para tal fin, se organizan las visitas necesarias tanto en consultas externas como en planta. Además, en la ambulancia asistimos a los pacientes en el cuidado de la pre y la post cirugía y los acompañamos en todas las preguntas cotidianas en cuanto a la epilepsia (permiso de conducir, embarazo, empleo, etc).

El tratamiento de la epilepsia se basa en tres pilares:

Primero: la terapia con fármacos que incluye los antiepilépticos de primera y segunda generación pero también el tratamiento con nuevos fármacos que actualmente se encuentran en ensayos clínicos. Segundo: La estimulación del nervio vago; que puede ser empleado adicionalmente al tratamiento médico, cuando con este no se pueda realizar un control de los crisis de una manera satisfactoria.

Tercero: El tratamiento quirúrgico; el fin es la resección de la zona epileptógena del cerebro. Esta medida terapéutica solamente se puede realizar cuando : 1) un tratamiento médico con antiepilépticos no produce ningún efecto (prueba de una resistencia a los fármacos antiepilépticos) y 2) cuando para el diagnóstico es necesaria la realización de pruebas de neuroimagen estructural y funcional (PET, SPECT), neuropsicología y el diagnóstico a través de vídeoEEG (grabación de las crisis comiciales con el registro simultáneo de datos del EEG y videos, que indicarían la zona cerebral responsable de las crisis). En casos de duda sobre el foco de inicio de las crisis, se podría ganar información adicional con la monitorización invasiva, donde se implentarían electrodos directamente en el cerebro o en la superficie de éste. Con los electrodos implantados, además del registro del EEG se puede producir una estimulación, para reconocer zonas del cerebro que tienen funciones importantes y proteger estas en el caso de una cirugía. También tiene a su disposición métodos de radiocirugía para el tratamiento de tumores no accecibles con procedimientos quirúrgicos.